“Permítanme decirles que el único objetivo que los Vedas tienen en vista es hacer Divino al hombre a través de una serie de ejercicios espirituales”
“Para la protección de los virtuosos, para la destrucción de los malvados y para el establecimiento de la rectitud sobre una base firme, Yo encarno de edad en edad. Siempre que la desarmonía (ashanti) agobia al mundo, el Señor encarna en forma humana a fin de instituir los modos para obtener la paz espiritual suprema (Prashanti) y reeducar de nuevo a la humanidad en los senderos de la paz. En la actualidad, la rivalidad y la discordia han robado la paz y la unidad a la familia, la escuela, la sociedad, las religiones, las ciudades, y el estado.
El advenimiento del Señor también es esperado ansiosamente por santos y sabios. Los aspirantes espirituales (sadhus) han orado y Yo he venido. Mis principales tareas son fomentar el conocimiento de los Vedas y el alentar a los devotos. Vuestra virtud, vuestro auto-control, vuestro desapego, vuestra fe, vuestra firmeza: estas son las señales a través de las cuales el mundo se entera de Mi gloria. Ustedes podrán proclamar que son devotos solamente cuando se hayan puesto total y completamente en Mis manos, sin ningún rastro de ego. Ustedes pueden gozar de la bienaventuranza por medio de la experiencia que les confiere el Avatar. El Avatar se conduce de manera humana a fin de que la humanidad pueda sentir afinidad, pero se eleva hacia sus alturas sobrehumanas para que la humanidad pueda aspirar a alcanzarlas, y a través de tal aspiración lo alcance realmente a Él.
Reconocer al Señor dentro de ustedes como el Motivador es la tarea para la cual El viene en forma humana. (1)
Ustedes son los hijos de la Madre Veda, a quienes ella ama tan afectuosamente que los ha llamado hasta aquí para presenciar este gran Yagna védico. Bharath es la tierra que Dios ama, pues Él se ha hecho Avatar (encarnación divina) aquí con frecuencia, e incluso ahora se está moviendo en este país, llevando a cabo Su Misión de restaurar el Dharma (rectitud) a personas que lo están ignorando. Este Yagna (ritual védico de sacrificio) es todo un asunto en esa grandiosa tarea.
Muchos han caído en el hábito de preguntar: ¿cuál es el objetivo de estas instrucciones?, ¿qué podemos obtener de ellas? Bien, permítanme decirles que el único objetivo que los Vedas tienen en vista es hacer Divino al hombre a través de una serie de ejercicios espirituales. Ellos conducen al hombre desde la condición animal, cuando cree que él es sólo este cuerpo que padece hambre, sed y deseos de varias clases, hacia la condición de humanidad, cuando reconoce que él es muy superior a un animal y, más adelante, los Vedas lo persuaden a utilizar su inteligencia y discernimiento para sublimar sus pasiones y emociones hacia el nivel Divino, donde están en eterna bienaventuranza.
Los Vedas elaboran el Sanathana Shastra (la ciencia fundamental del espíritu). Comprender bien esta ciencia y practicarla conforman los deberes que cada hombre se debe a sí mismo. ¡Esa ciencia resulta en la remoción de la ignorancia, la obtención de conocimiento; no el conocimiento de lo material, cosas mundanas, que cambian y son sustituidas cada cinco años! Dota al buscador con el conocimiento de que es la clave de toda la gama del conocimiento que, de ser sabido, todo lo demás es sabido.
Es por eso que los Vedas se llaman así. La palabra significa Vedayhathi ithi Vedah, es decir: “Veda significa lo que los hace saber”. El principio cósmico es susceptible a la fórmula mística y a los patrones de sonido que representan los mantras de los Vedas (el mantra y su repetición son esenciales para toda clase de hombres. Mantra es aquello que puede salvar si uno medita en ello). La constitución material de Dios puede ser adorada por el yantra (instrumento, artefacto, máquina); su constitución espiritual tiene que ser propiciada por medio de los mantras.
Es la actividad la que manifiesta si el individuo o la sociedad son buenos o malos. El termómetro mide la temperatura del cuerpo y anuncia si el cuerpo está sano o enfermo. El karma o actividad es el indicador del carácter interno. Al observar las acciones de uno, sus motivos, sus consecuencias y el alcance de la participación de uno, es posible declarar a alguien como una pashu (bestia) o Pashupathi (el Señor de las Almas Individuales), es decir, tan Divino como Dios Mismo.
Yagna significa, como saben, sacrificio; thyaga, renunciación.
El Yagna celebrado aquí no tiene un deseo individual en particular para satisfacer. El objetivo es asegurar la prosperidad y la paz, no de algún individuo, no de alguna religión o comunidad o país, sino de toda la humanidad.(2)
Conozco la agitación de sus corazones y sus aspiraciones, pero ustedes no conocen Mi corazón. Reacciono al dolor que ustedes sobrellevan y a la alegría que sienten, porque Yo estoy en sus corazones, Soy el morador en el templo de cada corazón. No pierdan Mi contacto y compañía, pues es sólo cuando el carbón está en contacto con la brasa, que puede también convertirse en brasa.
Cultiven la cercanía conmigo en su corazón y serán recompensados. Entonces ustedes también adquirirán una fracción de ese amor supremo. Esta es una gran oportunidad. Confíen en que serán liberados. Sepan que ustedes están Salvados. Muchos vacilan en creer que las cosas mejorarán, que la vida será feliz y llena de alegría para todos, y que habrá de volver la Edad de Oro. Permítanme que les asegure que este cuerpo Divino (Dharma Swarupa) no ha venido en vano. El Triunfará en conjurar la crisis que se cierne sobre la humanidad” (1).
Sathya Sai Baba: (1) 23/11/1968: 43 AÑOS DEL ADVENIMIENTO DEL AVATAR (2) Prashanti Nilayam, 10/10/1974.