“Esta tierra de Bharat ha dado nacimiento a muchas nobles mujeres como Savitri que le devolvió la vida a su esposo muerto; Chandramati que extinguió el fuego con el poder de la verdad; Sita que probó su castidad al salir ilesa del fuego y Damayanti quien redujo a un malvado cazador a cenizas por el poder de su castidad. Esta tierra de piedad y nobleza alcanzó la abundancia y la prosperidad y se volvió Maestra de todas las naciones del mundo debido a tales castas mujeres.”
(Poema en Telugú) Discurso Divino 19 de Noviembre de 2002.-
“La MUJER es el pilar, el sostén del hogar y de la religión. Ella planta y nutre la fe religiosa, o la seca y desarraiga. Las mujeres poseen una aptitud natural para la fe y el esfuerzo espiritual. Las mujeres con devoción, fe y docilidad pueden guiar a los hombres por el sendero espiritual y la práctica de las virtudes sagradas. Se levantan temprano, antes del alba, limpian el hogar y, después de bañarse y asearse, se sientan un rato a invocar el Nombre de Dios y meditar. Tendrán en sus hogares un pequeño cuarto reservado para la adoración de Dios. Colocarán allí imágenes y estatuas de su Deidad preferida, así como otras de santos, guías y maestros. Considerarán este cuarto como especialmente sagrado y llenarán la atmósfera con sus oraciones, tanto de mañana cono de tarde, así como en los días santificados y en las fiestas religiosas. Una mujer que se dedica a estas prácticas con constancia, será capaz de cambiar incluso a su esposo ateo, logrando que se una a ella en las oraciones o a ocuparse de alguna actividad beneficiosa, o algún plan de servicio social, imbuido por una actitud de dedicación a Dios. Es la mujer la que, sin duda alguna, mantiene la unidad del hogar; ésa es su misión. Ella es indiscutiblemente la representante de la Divina Energía.”
Sathya Sai Baba – Torrente de Virtud (Dharma Vahini) cap. 04.-
“La observancia de la virtud es señal de hombría o de humanidad.
Todos y cada uno deben dedicarse a actividades virtuosas, al mismo tiempo que ponen en práctica las metas de la vida humana virtud para procurarse la prosperidad, y su uso para caridad con fines virtuosos y deseo para lograr Liberación.
Así como la virtud de la castidad es para las mujeres, la continencia se aplica a los hombres. Así como la mujer debe considerar a una sola persona como su dueño y esposo, también el hombre debe serle fiel a una sola mujer como su compañera y esposa. Ella debe considerar a su esposo como Dios; venerarlo, atenderlo y seguir sus deseos para el cumplimiento de su deber de esposa casta y virtuosa. De la misma forma el hombre debe honrar a su esposa como la “dueña del hogar” y actuar de acuerdo con sus deseos, pues ella es la Diosa de la Prosperidad. Sólo entonces puede merecer el calificativo de “hombre”.
Nombre y fama, honor y deshonor, vicio y maldad, bueno y malo se aplican en medida igual y uniforme tanto a hombres como a mujeres. No existe nada que dictamine que solamente las mujeres estén atadas y obligadas y los hombres sean libres; ambos se hallan igualmente obligados por las reglas de la virtud y la moralidad. Todos caen en vicio si actúan sin tomar en consideración los cuatro atributos fundamentales: Rectitud, Ecuanimidad, Amor y Mansedad. Al igual que las mujeres, también los hombres están atados en algunos aspectos, y no tienen el derecho de hacer ciertas cosas. Hay algunos votos importantes. Entre el esposo y la esposa existen ciertos compromisos muy importantes.”
Sathya Sai Baba – Virtud (Dharma Vahini) cap. 06.-
“La mujer hindú debe tener siempre presente, como su guía, el ideal de la virtud y del progreso en la disciplina espiritual. Puede llegar a dominar cualquier materia relacionada con el mundo objetivo que hoy tenga preeminencia, pero el bienestar del espíritu no debe caer en el olvido. Tiene que interesarse en estudiar las escrituras que cultivan la Visión Interna. Una mujer que carece de este tipo de preparación, es como una roca sin base, un peligro para ella misma y para los demás, una persona muy desequilibrada. Muchas santas que siguieron estos estudios, se convirtieron en conocedoras de lo Absoluto y ganaron gran renombre. India produjo numerosas santos y sabias entre sus mujeres. Los eruditos y sabios solían acercarse a tales mujeres en busca
de inspiración y guía.”
Sathya Sai Baba – Virtud (Dharma Vahini) cap. 05.-
“Por lo tanto, cualquiera que sea el tema o la materia en que una mujer se haya perfeccionado, sea cual fuere el grado de su educación o la posición que ocupe ella o su esposo, tiene que atenerse estrictamente a estas verdades: un carácter excelente constituye verdadero encanto, la moralidad es el aliento mismo de la mujer, la modestia es su energía vital, adherirse a la Verdad es su diaria obligación. Debe plantar las semillas del temor (al pecado, miedo a ofender a Dios) en su corazón y cultivar el encanto de la humildad. En los campos religiosos, morales y físicos debe adherirse a los estrictos dictados de la virtud y considerar eso como esencia de todo conocimiento. Debe estar preparada a sacrificar hasta su vida por su honor. Debe nutrir y preservar su castidad y la adoración de su esposo. Esa es la virtud principal de la mujer, ése el deber con ella misma y con los demás. Esta es la razón verdadera por la cual ha nacido la mujer.”
Sathya Sai Baba – Virtud (Dharma Vahini) cap. 05.-