MEDITACIÓN: Palabras de Sathya Sai Baba sobre la Meditación»»
Meditación en la Luz en Unidad Nacional»
El 2° domingo de cada mes, Argentina Medita en Unidad
ABRIL
“El Amor es la mejor medicina”
“Algunos meditan pero fácilmente se distraen por el olor proveniente de la cocina ¿Cómo puede llamarse a esto una plegaria al Señor? Todas sus prácticas espirituales son hechas con una mente ondulante. Oren sinceramente con una mente firme. Ustedes están destinados a cosechar los frutos.
MARZO
“¿Qué es el Ser?”
FEBRERO
“Practicando la meditación en silencio y soledad,
se puede, a su debido tiempo, establecer el silencio y
la soledad en el corazón, aun por los más transitados caminos.”
ENERO
“¿Cómo deben meditar?
Deben observar absoluto silencio.
Pueden oír el sonido de las pisadas de Dios
solamente en la profundidad del silencio.”
DICIEMBRE
El silencio y la soledad
“El silencio debe empezar dentro de uno mismo”
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NOVIEMBRE
“Uno debe meditar y volverse calmo”
“Todo esto es verdaderamente Brahman”
OCTUBRE
“El Gita dice: “Las manos y los pies de Dios están en todas partes”. Ustedes podrán escuchar sus pasos sólo cuando ningún otro sonido los encubra. Dios, en su infinita gracia, asume la forma que el devoto anhela ver.”
SEPTIEMBRE
“Menos deseos hacen que el viaje de la vida se facilite y sea más feliz”
AGOSTO
“Hagan todas las acciones para complacer a Dios”
(Sarva Karma Bhagavad Prîtyartham)
JULIO
“japasahithadhyana o japa acompañado de dhyana”
“No necesitan siquiera leer el Gita o los Upanishads, ustedes oirán un Gita especialmente hecho para ustedes si acuden al Señor en sus propios corazones.”
JUNIO
“La capacidad de mantener una mente ecuánime es samadhi”
MAYO
“Insisto en la meditación como un punto indispensable de la práctica espiritual de cada miembro de esta Organización.”
ABRIL
“…el resultado de la meditación será que este individuo de Luz irá a fundirse en la Luz Imperecedera y les enseñará la naturaleza del Advaita o unidad de este mundo y de la creación entera.”
MARZO
“La meditación es superior a vuestros órganos sensoriales”
“La meditación es superior a vuestros órganos sensoriales, en tanto que la concentración está supeditada a ellos. Aquí va un pequeño ejemplo. Hay un rosal y en él tienen las hojas, las ramas, las espinas y las flores mismas. En este contexto se podrá llamar concentración a la habilidad de distinguir entre flores, espinas, ramas y hojas. Después de mirar todas estas cosas, podemos identificar a las flores. Una vez que han sido capaces de localizar a la flor y de concentrarse en ella, pueden cortarla sin tocar las espinas. Una vez cortada, no habrá relación alguna entre la flor por un lado y las hojas, las ramas y las espinas, por otro. La separación de la flor de las otras partes del rosal, se llama contemplación. Toman la flor y se la ofrendan a Dios. Después de haberle ofrecido la rosa a Dios, tanto el rosal como las ramas, vuestra mano e incluso la flor, ya no existen en absoluto. Esta ofrenda, en la que todo lo demás desaparece y únicamente Dios existe, se llama meditación. Vuestra vida es un rosal. Todas vuestras relaciones son las ramas en él. Vuestras cualidades serán las hojas y vuestros apegos y deseos, las espinas. Vuestro amor es la flor de la planta. El ejercicio de mantener apartada la flor de vuestro Amor, de mantenerla alejada de las espinas de los apegos y las ramas de las relaciones, es la contemplación. En el momento en que le ofrendan este Amor a Dios, habrán alcanzado la unidad de las tres cosas. Este Amor es un Amor Puro. La razón para esto, es que ustedes habrán apartado ya las espinas y las hojas de la flor, de modo que tienen en la mano la pura flor del Amor. Mientras acechen los deseos materiales dentro de ustedes, vuestro afecto será considerado como deseo. El Amor Puro y verdadero se manifestará cuando se haya retirado el deseo de vuestro afecto. Este amor tiende a expandirse, porque es desinteresado. El tipo de amor que se contrae se basa en el egoísmo. Podrán cultivar el Amor Puro, manteniéndose en buena compañía y poniendo en práctica las directivas que entregan nuestros Vedas y Upanishads. Deben considerar vuestra inteligencia como un espejo y tratar de mantenerlo limpio. La verdadera naturaleza de sí mismos, en cuanto hombres, sólo podrá ser vista en el espejo de vuestra inteligencia. Solamente cuando puedan ver a todo este mundo como vuestra casa, podrán darle una forma a vuestro amor, como para hacer que se vaya expandiendo.”
Sathya Sai Baba, Lluvias de verano Tomo 2 cap. 24
FEBRERO
“La meditación es diferente de la concentración.”
“Si quieren cambiar los aspectos mundanos en Karma sin apegos, se hacen necesarias algunas prácticas espirituales. Se puede hacer referencia a ellas como meditación. ¿Cómo llevamos a cabo esta meditación y cuál es su sentido interno? Hemos de desarrollar nuestra fe en las variadas sendas que llevan a la meditación. Sólo entonces resulta posible alcanzar el objetivo de la meditación o comprender su propósito. El término ”meditación” está siendo interpretado por muchos de manera muy variada. También son muchos los que se han dedicado a prescribir diferentes tipos de meditación, con lo que han contribuido a provocar cierta confusión en la mente de los aspirantes. La meditaciónrepresenta la práctica a través de la cual el aspirante medita en Dios y, de esta manera, unifica los tres constituyentes: el objeto de la meditación (Dios), la persona que medita (el ”yo” o individuo) y el proceso (la meditación misma). La combinación y unificación de los tres es la meditación. En estos días se interpreta mal su proceso y su significado y se los hace equivaler a la concentración o la focalización de la mente en un solo propósito.
No necesitamos meditar para lograr concentración. De hecho, estamos concentrándonos todo el tiempo. El beber, el comer, el escribir, el leer y el caminar exigen concentración. La concentración se refiere a algo que está subordinado a los diferentes sentidos de la percepción: oído, tacto, vista, gusto y olfato. Si van a leer un diario, los ojos tendrán que verlo, las manos tendrán que sostenerlo y, por último, la mente sintetizará todas las percepciones. Sólo cuando se conjugan todos estos actos por medio de la concentración, podemos leer el diario. Si salimos a caminar por la carretera, tendremos que estar atentos al tránsito y tendremos que mantenernos alertas frente a la existencia de obstáculos, hoyos, serpientes o escorpiones. Así también se requiere de gran concentración para conducir un automóvil. Pero este tipo de concentración que nos es familiar en lo cotidiano, no puede llamarse meditación. Lo que se denominará ”meditación”, se dará cuando tengan como objetivo lo Divino, el elevarse por sobre los sentidos y mantener a la mente muy por encima de los órganos sensoriales. De este modo, la meditación es superior a vuestros órganos sensoriales, en tanto que la concentración está supeditada a ellos.”
Sathya Sai Baba, Lluvias de verano Tomo 2 cap. 24
ENERO
“A continuación les voy a enseñar el método más universal y efectivo que existe. Éste es el primer paso de la disciplina espiritual.”
Proponemos tener como guía estas palabras de Swami (Discurso del 21 de noviembre de 1979) que, en Su infinita Bondad, nos van mostrando el camino paso a paso, conduciéndonos a la meditación para convertirnos en Encarnaciones de Amor, Paz y Felicidad.
“Tengan una vela o una lámpara con una llama firme y recta. Siéntense en postura de loto o en alguna otra que sea cómoda para ustedes enfrente de la vela. Concentren la mirada en la llama sin parpadear durante determinado tiempo, cierren los ojos y traten de sentir la llama en el entrecejo; háganla descender hasta el loto del corazón iluminando todo a su paso. Cuando entre en el corazón imaginen que los pétalos de loto se abren y que la luz baña cada pensamiento, sentimiento y emoción alejando la oscuridad.
Ante la luz no hay lugar donde la oscuridad pueda reinar. La luz de la llama se vuelve cada vez más brillante. Dejen que penetre en las extremidades; ahora esas extremidades ya no pueden ocuparse en actividades oscuras y perversas; se han convertido en instrumentos de luz y amor. Permitan que la luz llegue a la lengua y desvanezca la falsedad que reina en ella. La llama llega a los ojos y oídos y ahí destruye los bajos deseos que los infestan con escenas malsanas y conversaciones pueriles. Ahora permitan que la cabeza se llene de esa luz y ahuyente de ella los malos pensamientos.
Sientan que la luz dentro de ustedes, va aumentando en intensidad, y se extiende a su alrededor en círculos cada vez más amplios, abarcando a sus seres queridos, parientes, amigos, hombres y mujeres, conocidos y extraños, y envuelve hasta sus rivales y enemigos, dondequiera que se encuentren; todos los seres vivientes, el mundo entero.
Quédense ahí, con esa sensación, y sean testigos de la luz omnipresente. Si acostumbran adorar a Dios en alguna de sus formas, traten de visualizarlo en esa luz todopermeante. La luz es Dios y Dios es la luz.
En cada respiración ustedes repiten “Soham” “Yo soy Él”, y no sólo ustedes, sino todo ser vivo en la creación. Esto es un hecho que siempre han ignorado. Acéptenlo ahora. Cuando observen su respiración y mediten en esa gran verdad, Yo soy Él, lentamente ambos se fundirán, y para siempre desaparecerá la dualidad. Soham se habrá transformado en Om, el sonido primigenio; el Pranava que los Vedas proclaman como el símbolo del Absoluto Universal, subyacente en todo, sin forma. Ese Om es la propia forma, la realidad detrás de toda esta “irrealidad relativa”. Así se convertirán en encarnaciones de amor, paz y felicidad.”
Sathya Sai Baba Divino Discurso del 21 de noviembre de 1979
2018 El 3° domingo de cada mes, Argentina Medita en Unidad
DICIEMBRE
“…serán capaces de oír el sonido “Om”
que viene desde dentro de ustedes”
El Sadhana para el autocontrol.
Esta técnica se describe como tantra. Consiste en una variedad de prácticas llamadas mudras:
Kechari mudra; bhuchari mudra; madhyama mudra; shanmukha mudra y shambhavi mudra. Con la práctica de estos mudras, los sabios trataban de llevar los sentidos y la mente hacia adentro.
Khechari Mudra: Consiste en concentrar los dos ojos en el punto medio entre las cejas, durante la meditación. Este ejercicio permite la integración de la visión mediante la cual se experimenta la propia realidad. Esto puede también ser practicado cerrando los ojos, pero concentrando la mirada internamente en el punto medio entre las cejas. Hacer el mudra con los ojos abiertos es una experiencia penosa.
De allí que se prefiera la concentración con los ojos cerrados.
Bhûchari Mudra: En éste, la meditación se hace con los ojos y la mente concentrados en la punta de la nariz. Cuando se medita sobre lo Divino, se experimenta una alegría única.
Madhyama Mudra: En éste, los ojos están concentrados en la mitad de la nariz entre la punta y el punto medio entre las cejas. Al contrario del bhûchari mudra, en el cual los ojos pueden estar totalmente abiertos, en éste los ojos se entreabren. Este mudra se vuelve más fácil después de practicar el bhûchari mudra.
Un ejercicio para el control de los sentidos Shanmukha mudra: Es un ejercicio muy sagrado y también, uno muy difícil de practicar. Consiste en cerrar con los dedos de ambas manos los ojos, los oídos y las dos fosas nasales. Con la práctica gradual, se debe tratar de practicar este mudra durante por lo menos siete minutos seguidos. Se debe respirar aire una vez cada siete minutos. Por medio de la práctica regular, esta forma de control de los sentidos puede volverse un hábito. No se sentirá ninguna incomodidad a causa del control de la respiración. Con esta práctica, todos los órganos de los sentidos y la mente están absortos en la exploración de lo interno. El objeto de esta disciplina es alejar los órganos de los sentidos, de la influencia de los sucesos y objetos del mundo externo.
Por ejemplo, cuando los oídos oyen sonidos de afuera, la mente se excita o se complace. Similarmente, cuando los ojos ven ciertos objetos o personas, la mente es influida de un lado o de otro. Pero, al cerrar los ojos y los oídos, la mente es inducida a pensar menos acerca del mundo externo y así se logra que adquiera algo de serenidad.
Al cerrar las fosas nasales, la mente es alejada de la influencia de los olores. De esta forma, cuando los órganos de la vista, de la audición y del olfato son controlados, la mente se vuelve hacia adentro.
Hoy en día, todos nuestros órganos sensorios están totalmente absortos en experimentar el mundo externo. Al escuchar algún chisme o algo sobre algún extraño, la gente desarrolla una curiosidad malsana acerca de los hombres y las cosas.
Mirando hacia adentro.
Todos nuestros pensamientos son influidos por lo que vemos, oímos u olemos. Debemos tratar de controlar los órganos de los sentidos, especialmente los oídos y los ojos. Si cierran los ojos aun por un breve momento, serán capaces de oír el sonido “Om” que viene desde dentro de ustedes. Este sonido pranava puede ser oído cuando cierran todas las puertas y ventanas y dejan que sople el viento a través de un pequeño resquicio.
El cuerpo es como una casa que contiene los diez indriyas, de los cuales cuatro son importantes: los ojos, los oídos, la nariz y la boca. Si cierran estas cuatro aberturas, se puede oír el sonido “Om” que surge de adentro. Esto representa el sonido primordial:
Nada bindu. La luz del Atma brilla más allá de este sonido primordial.
De allí que lo Divino sea llamado Nada Bindu Kalatita: “lo que trasciende el rango del omnipenetrante nada o sonido, el Pranava”. El objeto del shanmukha mudra es revelarnos las vibraciones del “Om”. Cuando nos concentramos en este “Om”, los sentidos y la mente se alejan del mundo externo hacia el mundo interno del espíritu.
El control de la mente es el medio para alcanzar la liberación (moksha). La pureza de la mente es el requisito primordial. Cuando la mente está libre de malos pensamientos y llena de buenos pensamientos, es llamada chitta o conciencia.
El santo tamil Tiruthondar declaró en uno de sus himnos: “¡Oh Rama! ¡Te adoro con una mente pura!”.
Sambhavi Mudra: Este mudra tiene el objeto de controlar los cinco sentidos de la acción (karmendriyas), los cinco sentidos de la percepción (jñanendriyas) y los cuatro órganos psíquicos: manas (la facultad mental), buddhi (el intelecto), chittam (la conciencia) y ahamkara (el ego o egotismo). Estos catorce elementos deben ser dirigidos hacia la búsqueda espiritual. El aham o “yo” está sostenido por el ahamkara, el egotismo, chitta, la conciencia, buddhi, el intelecto y manas, la facultad mental. Cuando se destruye el egotismo (ahamkara), el corazón (chitta) se purifica. Un corazón puro imparte iluminación al intelecto o poder discriminatorio (buddhi).
Cuando el intelecto es iluminado, la mente se vuelve pura. Y sólo una mente pura puede controlar los órganos de los sentidos y dirigirlos por el camino correcto.
Característica de una persona verdaderamente cultivada.
El ego puede henchirse por cualquier número de cosas. Puede ser la riqueza, el conocimiento, el poder, la posición, la belleza o la inteligencia. Este engreimiento está invariablemente asociado con malos rasgos. Indica el dominio de los órganos de los sentidos sobre nuestra mente. Muchos son propensos a sentirse orgullosos de su conocimiento o capacidad intelectual. Pero el conocimiento y la inteligencia sin carácter y buena conducta no tienen ningún valor. El aprender sin discernimiento lo que está en los libros, sin comprender plenamente su significado o llevar el conocimiento a la práctica, es un ejercicio verbal fútil. La información de los libros y la capacidad intelectual no constituyen cultura. Una persona verdaderamente cultivada es la que comprende lo que estudia y hace uso apropiado de ese conocimiento.
En cuanto al conocimiento de los mudras mencionados antes, algunos pueden tratar de practicarlos. No hay nada malo en hacerlo.
Los tres mudras —khechari mudra, shanmukha mudra y sambhavi mudra— son de inmenso valor para desarrollar el control de la mente.
La práctica de estos mudras está estrechamente relacionada con el despertar de los seis centros o chakras en la columna vertebral.
Sathya Sai Baba – El Universo se basa en la Mente – 31 de Julio de 1986
NOVIEMBRE
MEDITACIÓN y el control de los sentidos
“La mente es extremadamente sutil. Deriva su energía del alimento.
En el diálogo entre Uddalaka y Shvetaketu(*1), en el que tiene una mente pura está lleno de pensamientos puros, y bulle con la energía del amor puro. La sabiduría es el florecimiento de la pureza en la mente. Sólo tal clase de persona puede lograr el control de los sentidos.
Una persona autocontrolada, al descubrir su naturaleza Divina, puede iluminar el mundo a su alrededor. Al igual que un palillo de incienso que derrama su fragancia en todas direcciones, el nombre y fama del individuo autorrealizado y de corazón puro alcanza a todos. Los pensamientos puros son la clave para la pureza de mente. Los pensamientos tienen una realidad objetiva propia.
Tratan con las seis características asociadas con los objetos físicos:
peso, forma, calidad, tamaño, fuerza y color. Si un hombre tiene una flor de champaka (Michelia Champaka) en su mano, la fragancia de esa flor es llevada por él adonde vaya. De la misma forma, él también llevará un mal olor a donde vaya. Igual sucede con los pensamientos buenos o malos. Ellos irradian sus buenas o malas vibraciones en su entorno. Los pensamientos tienen tanto poder que, cuando van dirigidos hacia mayores objetivos, pueden ser usados para influir en el mundo. Cuando la mente está colmada de buenos pensamientos, tales como los de verdad, amor, tolerancia y compasión, la vida de uno está llena de paz y serenidad. Si, por el contrario, uno permite que crezcan pensamientos de odio, envidia, ira y orgullo, la vida se convierte en una infelicidad perpetua.
Los pensamientos y la vida. El rostro es el reflejo de la mente. Cuando sienten mala voluntad hacia alguien, su enemistad altera su cara y sus gestos. Cuando abrigan pensamientos buenos y amorosos, su corazón se llena de alegría y experimentan una oleada de felicidad. Si colman su corazón de amor, la vida entera se vuelve una saga de amor. Si la llenan de odio, envidia y orgullo, la vida se convierte en un terrible desierto.
Un árbol que tiene raíces profundas en el suelo no puede ser destruido cuando sus ramas u hojas son cortadas. De la misma manera, cuando las malas cualidades tales como el odio y la envidia han echado raíces profundas en el árbol de la vida, no se las puede eliminar golpeando algunas de las ramas. Suprimir los malos pensamientos, de manera intermitente, no erradicará los males. La mente debe vaciarse por completo de todos los malos pensamientos, para lograr una paz verdadera. Cada mal pensamiento debe ser arrancado en el instante en que surge en la mente. La guerra contra los malos pensamientos es como una guerra contra hordas enemigas que tratan de entrar en una fortaleza, por detrás, por medio de un túnel. A medida que cada enemigo emerge del túnel, debe ser eliminado. Cada uno de los órganos de los sentidos —el ojo, la lengua o el oído—, cuando está influido por un mal pensamiento, se va extraviando y se comporta de manera impropia. Si son influidos por buenos pensamientos e impulsos, actúan de una manera que produce alegría y contento. En cuanto el ojo ve a alguien que es considerado un enemigo, la mala voluntad surge en la mente. Por otra parte, cuando uno ve a un amigo querido, la reacción es de amor y afecto.
Las palabras sagradas generan un poder elevador. Del mismo modo que con las cosas que se ven, lo que oímos puede también tener malos o buenos efectos. El poder de las palabras para influenciar la mente es aún mayor. Los grandes pronunciamientos védicos como “Yo soy Brahman” (Aham Brahmasmi), Tú Eres Aquello (Tat Tvam Asi) y Yo Soy el Atma (Ayam Atma Brahma) proveen inspiración para apuntar a la más alta meta. No deben ser interpretados o usados de una manera que alimente el ego.
Cada expresión está cargada de poder propio. Si las palabras usadas son sagradas, generan un poder santificador y elevador. Si las palabras son abusivas y vulgares, despiertan excitación, ira o depresión.
La alegría o la aflicción experimentada por la mente es el resultado de las impresiones transmitidas por los sentidos. Todas las experiencias son producto de la mente. El mundo mismo es una proyección de la mente. La mente puede acercar cosas remotas o enviar cosas a lo lejos. Es la fuente del placer o del dolor. Los sabios declararon: “Este universo se basa en la mente” (Mano mulam idam jagat).
La mente busca adquirir algo con mucho esfuerzo, en la esperanza de que su posesión le dará placer. Pero el placer derivado de ello dura poco tiempo. Y la aflicción causada por su pérdida es considerable. Hay problemas durante el proceso de adquisición. La posesión confiere placer sólo temporalmente. La pérdida del objeto deja una secuela de aflicción. Muy a menudo, el dolor de la pérdida excede el placer de la ganancia. Es un desperdicio fútil de la propia vida ir tras dichos placeres transitorios. Al darse cuenta de la inutilidad de tales objetos, los sabios practicaron el autocontrol como el medio de obtener felicidad duradera. Desarrollaron la técnica de dirigir los sentidos y la mente hacia adentro para buscar la fuente de la bienaventuranza duradera.
Sathya Sai Baba – El Universo se basa en la Mente – 31 de Julio de 1986
(*1) El más grande de los grandes mahavakyas, Tat Tvam Asi, se encuentra originalmente en el Chandogya Upanishad (c.600 aC) en el diálogo entre el sabio Uddalaka Aruni, el padre y su hijo Svetaketu.
El discurso da una idea del conocimiento de la verdad última y del Sí mismo real. El padre cariñoso explicala relación entre el individuo y el Absoluto. La declaración se repite con frecuencia en el sexto capítulo, ya que el padre, que también es el maestro, instruye a su hijo sobre la naturaleza del brahman , la realidad suprema.
Tat es el brahman y tvam el ser divino, el Atman que reside en el jiva. Asi es una afirmación que armoniza el Brahman y el Atman.
OCTUBRE
“Para llegar a la esencia misma de Dios, primero debemos alcanzar la esencia de nosotros mismos, pues nadie puede conocer a Dios a menos que se conozca a sí mismo.”
“Para llegar a la esencia misma de Dios, primero debemos alcanzar la esencia de nosotros mismos, pues nadie puede conocer a Dios a menos que se conozca a sí mismo.
Después de sentarse en una postura firme y cómoda y luego de calmar la respiración, se procede a la práctica de retirar los sentidos de percepción de los objetos correspondientes y de purificar todos los órganos del cuerpo. La luz es el elemento más apropiado, pues purifica y desvanece la oscuridad. La luz o llama ha de recorrer todo el cuerpo para purificar nuestros miembros y sentidos; enseguida se coloca en el loto del corazón. Aquí se instala, además, en medio de la llama, la forma del ideal divino con el propósito de practicar la concentración. Ésta nos conducirá a la meditación y finalmente al samadhi (el estado de fusión con Dios, el Supremo Ser).”
Sathya Sai Baba 21 de Noviembre de 1979
SEPTIEMBRE
“…nunca te olvides de la Forma auspiciosa. Imagínate que toda la Creación está inmersa en Ella.”
Dudas Resueltas (Sandeha Nivarini) cap. 15 – Bhagavan Sri Sathya Sai Baba
LA MEDITACION
Devoto: Swami, tengo algunas dudas acerca del tema de la meditación sobre el cual Tú estás escribiendo ahora: ¿Te puedo preguntar?
Swami: Por supuesto, puedes preguntar y eliminar tus dudas. Es bueno para ti, y a Mí me alegra.
Devoto: Algunos practican la meditación pero son incapaces de saber si su meditación ha progresado o no. ¿Qué dices Tú de eso?
Swami: Progresar en meditación significa conseguir concentración. Cada uno puede juzgar por sí mismo, sin duda, lo mucho que ha logrado en la concentración. ¿No es así?
Devoto: Algunos dicen que durante la meditación ven todo tipo de cosas; algunos escuchan todo tipo de sonidos. ¿Es que esto indica progreso?
Swami: Estas son ilusiones, impiden el progreso. Siembran presunción y dispersan la concentración. El ser distraído por imágenes y sonidos no es signo de meditación.
Devoto: Entonces, ¿qué se debe hacer cuando uno los ve?
Swami: No permitas que la mente vague hacia ellos. No pierdas de vista la Forma Divina que has proyectado para ti. Convéncete de que estas ilusiones no son sino obstáculos que distraen tu atención de la Forma Divina. Si tú permites que estas imágenes y sonidos te invadan, la Forma Original será oscurecida, tu ego y orgullo se incrementará y perderás tu camino.
Devoto: ¡Pero Swami! ¡Alguna gente dice que estas cosas son signos de progreso en la meditación!
Swami: ¡Eso sólo significa que ellos mismos no están practicando la meditación correctamente! Por otro lado, no sabiendo lo que es la meditación engañan a sus discípulos hablándoles así, para complacerlos. Ese es el único beneficio conseguido.
Devoto: Bueno, ¿significa eso que en la meditación no podemos ver al Señor?
Swami: ¿Por qué no? Ciertamente, esto es posible. Si tú fijas tu atención en la hermosa y sublime Forma del Señor y te concentras en Eso solamente, recibirás Su Gracia en esa Forma de muchas maneras. Mientras lo haces, muchas distracciones pueden intervenir. No debes engañarte: estate alerta, nunca te olvides de la Forma auspiciosa. Imagínate que toda la Creación está inmersa en Ella.
AGOSTO
“El principio de Brahma está presente en todos y cada uno” (…) “El Mantra Soham (“Yo soy Brahma”) demuestra claramente esta verdad”.
SO HAM Introducción
“La Divinidad es el mismo aliento vital que puede ser percibido y oído”.
“Se dice que “Dios es el Morador interno en cada ser viviente” (Ishvara Sarva Bhutanam). Pero, ¿con qué forma? ¿Cómo puede uno contemplar a Dios con una forma invisible? ¿De qué sirve tal contemplación? La Divinidad es el mismo aliento vital que puede ser percibido y oído. ¿Cómo puede uno reconocer y experimentar el sonido de este divino aliento? Los Upanishads (textos sagrados) han dado los nombres de “Brahman” (divinidad impersonal) y “Atma” (esencia del ser) a este invisible aliento humano en los seres humanos. Pero no es fácil comprender estos conceptos abstractos ni siquiera con cualquier cantidad de explicaciones”.
Divino Discurso de Bhagavan Sri Sathya Sai Baba del 12 de Octubre de 2002.
“El sonido del aliento en el ser humano, es decir, Soham, establece la naturaleza de la Divinidad”.
¿Cuál es el significado de Divinidad (Ishvaratattva)? Puede ser comprendido como el divino y auspicioso aliento de Soham que emana de cada ser humano. Soham significa “Yo soy Aquello” (la Divinidad). El sonido del aliento en el ser humano, es decir, Soham, establece la naturaleza de la Divinidad. Si se trata de contemplar en la forma sin reconocer el sonido, no se podrá comprender la naturaleza de la Divinidad. Soham es por naturaleza sátvico. Esta cualidad sátvica es el Principio de Shiva o Ishvaratattva”.
Divino Discurso de Bhagavan Sri Sathya Sai Baba del 12 de Octubre de 2002.
Significado
“¿Cuál es el significado profundo contenido en el sonido sutil que oímos?”
“¿Qué es la vida? ¿Qué es lo que entienden por ella? Aceptan que la respiración del hombre, lo que inhala y exhala es su aliento vital y consideran eso como su vida. ¿Pero qué clase de sonido hace este aire que se inhala y se exhala? A pesar de que están respirando muchas veces durante todos los días, nunca se han detenido y tratado de entender el significado de esta respiración, ni siquiera el significado del número de veces que inhalan y exhalan. La forma en que respiran es “Soham”. “So” significa Dios o Brahman. Por lo tanto “So” representa a “Dios”. “Ham” significa “Yo” o “Mi”. De esta manera cuando inhalan y exhalan el sonido que se produce es “SOHAM” “YO SOY DIOS”, “YO SOY DIOS”. De entre todos los sonidos al que es de mayor importancia se le llama Pranava. A partir de este sonido único denominado Pranava, se producen todos los demás sonidos. “Del UNO se generan muchos”.
Divino Discurso Bhagavan Sri Sathya Sai Baba en 1972; en “Lluvias de Verano” nº1
“Yo y Él somos lo mismo desde el nacimiento hasta la muerte, significando que el jīva (cualquier entidad imbuida de una fuerza vital) es Brahman…”
“Hamsa es un símbolo del Soham, el manthra-semilla que es pronunciado por la respiración humana (Soham-Soham, So significa Él y ham significa Yo; Él es Yo). Yo y Él somos lo mismo desde el nacimiento hasta la muerte, significando que el jīva es Brahman, ni más ni menos. Ciertamente hay diferencia en la cantidad pero no hay diferencia en la calidad entre ambos. Una gota de agua de mar es tan salobre como cualquier otra; no hay necesidad de probar el mar entero para saber eso. El jīva es Sat-Chit-Ananda(verdad-consciencia-bienaventuranza); el Brahman también es Sat-Chit-Ananda. Esa es la razón por la cual se le pide al jīva anunciarse como Aham Brahmasmi (Yo soy Brahman)”.
Es tan verdadero como la gota de agua de mar diciendo: “Yo soy el mar”.
Divino Discurso de Bhagavan Sri Sathya Sai Baba de Junio de 1974.
“Soham, Soham, Soham” (“Yo soy Dios, Yo soy Dios, Yo soy Dios”). Este es el nombre que les fue dado por Dios”.
“Desde su mismo nacimiento, cantan el mantra “Soham”, “Yo soy Dios”, con cada inhalación y exhalación. Deberían realizar, al final, “Yo soy Dios”. Sus padres pueden haberles dado un cierto nombre. Si Yo pregunto “¿quién eres?” alguien dirá, “Yo soy Ramaiah” y otro dirá, “Yo soy Krishnaiah”. Estos nombres les fueron dados a ustedes por sus padres y no por Dios. “Soham, Soham, Soham” (“Yo soy Dios, Yo soy Dios, Yo soy Dios”). Este es el nombre que les fue dado por Dios. Es el nombre dado a cada cual, en el país, religión o comunidad a los cuales pertenezca. Aquellos que captan este principio divino y actúan en consecuencia son verdaderamente bendecidos. Pueden asistir a cualquier cantidad de reuniones y escuchar una cantidad de discursos, pero lo que deben saber al final es sólo una cosa y esa es el Ser, el Aham”.
Divino Discurso de Bhagavan Sri Sathya Sai Baba del 29 de Octubre de 2009
“El principio de Brahma está presente en todos y cada uno” (…) “El Mantra Soham (“Yo soy Brahma”) demuestra claramente esta verdad”.
“Los Vedas (conocimiento/revelación) se han referido a este principio de Amor como el Atma. Verdad, Amor y Rectitud son todos sinónimos del Atma. Los Vedas llaman al hombre Atmavan puesto que está dotado con el principio del Atma. El Atma también es considerado como Brahma. ¿Quién es Brahma? Las escrituras Le describen como Aquél que emergió del loto que se originó del ombligo de Vishnu (aquello que todo lo satura todo). Ese Brahma es el “Yo” (Aham) presente en todos. Entonces, el principio de Brahma está presente en todos y cada uno, ya se trate de un creyente como de un ateo. El Mantra Soham (“Yo soy Brahma”) demuestra claramente esta verdad. Este proceso de inhalación y exhalación tiene su origen en el ombligo del hombre. Se repite 21.600 veces al día recordándole al hombre su divinidad. Sin prestar atención a la enseñanza de la voz interior, el hombre acude a varias escrituras y a los Vedas en búsqueda de la divinidad. En primer lugar y en forma prioritaria escuchen a la voz interior que es el verdadero preceptor y Dios”.
Divino Discurso de Bhagavan Sri Sathya Sai Baba del 6 de Mayo de 2000.
“El Hamsa Gayatri o el Mantra Soham le entrega a uno el discernimiento para distinguir entre el Sí Mismo real y el que no lo es”
“Pueden alcanzar el conocimiento del Atma (su Sí Mismo) a través del auto-sacrificio y experimentar la bienaventuranza divina que es su real Svabhava (naturaleza interna). “Sva” simboliza al cisne – Hamsa, de quien se dice que posee la habilidad de distinguir la leche del agua. El Hamsa Gayatri o el Mantra Soham le entrega a uno el discernimiento para distinguir entre el Sí Mismo real y el que no lo es. Ustedes mismos son Hamsa. Mas, una vez que realizan su verdadero Sí Mismo y logran el conocimiento para discernir entre éste y el falso, se convierten en el Paramahamsa (un alma realizada)”.
Divino Discurso de Bhagavan Sri Sathya Sai Baba del 6 de Julio de 1996.
“Hasta su proceso de respiración habla de la presencia del amor dentro de ustedes”
“El amor es inherente en todos ustedes, pero lo están desviando hacia asuntos mundanos. El verdadero amor está relacionado con el principio átmico. El amor mundano está sujeto a cambio con el paso del tiempo, mientras que el amor espiritual es permanente. Hasta su proceso de respiración habla de la presencia del amor dentro de ustedes. Cuando inhalan, hacen el sonido ‘So’ y cuando exhalan el de ‘Ham’; juntos en ‘Soham’ significan, “Yo soy Aquello”. El principio del ‘Yo’ está uniformemente presente en todos. Eso se puede experimentar siguiendo los nueve pasos de la devoción. No les dejen lugar a las diferencias. Comprendan la unidad. “Yo y Ustedes somos uno”. Su amor se fragmenta cuando no visualizan la unidad en la diversidad. Hay sólo un corazón que es inmutable”.
Divino Discurso de Bhagavan Sri Sathya Sai Baba del 5 de Octubre de 2003.
“Dios está presente en cada ser como el eterno testigo. Esta verdad es proclamada por el sonido ‘Soham’ que es pronunciado con cada respiración”.
“Dios está presente en cada ser como el eterno testigo. Esta verdad es proclamada por el sonido ‘Soham’ que es pronunciado con cada respiración: ‘So’ con cada inhalación y ‘Ham’ con cada exhalación. ‘So’ significa Aquello o Dios y ‘Ham’ significa ‘yo’. Este proceso va ocurriendo 21.600 veces al día en cada ser humano. De esta manera, la voz interna le recuerda al hombre su naturaleza divina esa misma cantidad de veces al día. Pero el hombre actúa de manera tonta sin ponerle atención a su voz interna. ¿Quién es el hacedor? ¿Quién respira, quién habla, quién escucha, quién actúa? Es el Ser dentro de él que es el mismo en todos. Cultiven este espíritu de unicidad. El que hace y el que hace que hagan son uno y el mismo. Comprendan que no están sirviendo a otros, se están sirviendo a sí mismos”.
Divino Discurso de Bhagavan Sri Sathya Sai Baba del 24 de Febrero de 2002.
“Soham nos transmite la lección de que ustedes deben tomar solamente aquello que es bueno y expulsar lo que es sucio”
“Cualquier cosa que hagan, es el trabajo de Dios, por ejemplo, el proceso de inhalar y exhalar es en sí mismo, una práctica espiritual. El proceso de inhalar está asociado con el sonido “So” (aquel) y exhalar con el sonido “Ham” (yo). “Soham” significa “Yo soy aquel” (Dios). “So” simboliza la Divinidad y “Aham” significa Ahamkara (ego). Entonces, Soham nos transmite la lección de que ustedes deben tomar solamente aquello que es bueno y expulsar lo que es sucio. El proceso de inhalar se repite 21.600 veces por día, lo cual significa que su voz interna les está recordando 21.600 veces por día que ustedes son Dios, pero desdichadamente no son receptivos a este mensaje, pero para comprender esta realidad Dios les ha dado ese cuerpo. No limiten a Dios a su santuario, Dios es vuestro mismo aliento vital”.
Divino Discurso de Bhagavan Sri Sathya Sai Baba del 21 de Noviembre de 1999.
“… al experimentar la esencia del mantra ‘Soham’, obtienen alegría eterna”.
“La alegría que obtenemos de cantar bhajans y de cumplir con las oraciones es pasajera. Pero al experimentar la esencia del mantra ‘Soham’, obtienen alegría eterna. Este Soham es también conocido por el nombre de “Hamsa Gayatri”. ‘So’ significa ‘aquello’, ‘ham’ significa ‘yo soy’. ‘Yo soy aquello’ es el significado de Soham. Deben cantar Soham con cada aliento. Cuando respiran, inhalan ‘So’ y cuando exhalan expiran ‘Ham’. Si repiten el mantra Soham con cada inhalación y exhalación de aliento, les hará mucho bien. Repitan el ‘Soham’ con cada aliento y observen su respiración con cuidado”.
Divino Discurso de Bhagavan Sri Sathya Sai Baba del 26 de Mayo de 2002.
¿Cómo recitarlo?
“Esta contemplación constante en el principio del Soham es la verdadera práctica espiritual”.
“No debería ser su meta y esfuerzo el lograr resultados temporales haciendo prácticas espirituales transitorias. Deben tratar de lograr lo que es permanente, verdadero, eterno, puro y de felicidad duradera. Deben siempre, en todos momentos y en todos los lugares pasar su tiempo en la constante contemplación de Dios. Esto debe volverse el aliento mismo de sus vidas y tan natural como el inhalar y exhalar. Esto es el Principio del Soham o Soham Tattva. Esta contemplación constante en el principio del Soham es la verdadera práctica espiritual. ¿De dónde viene este ‘Soham’? Vino de la pregunta ‘Koham’, ¿Quién soy? El resultado de esta pregunta es ‘Soham’. Es sólo cuando realicen esta verdad eterna que su sadhana fructificará”.
Divino Discurso de Bhagavan Sri Sathya Sai Baba del 23 de Julio de 2002.
“Antes de empezar su sesión de meditación canten Soham; inhalando “so” y espirando “ham”, inhalando por una nariz y exhalando por la otra. Soham significa “Él es yo”, los identifica con el infinito y expande su conciencia. Armonicen el aliento y el pensamiento. Respiren suave y naturalmente; no lo hagan de manera artificial y laboriosa. Debe fluir hacia adentro y afuera, suave y silente; si tienen algo de harina en su palma y la sostienen delante de su nariz, no debe moverse en absoluto; ¡así de suave debe ser el aliento! Cuanto más rápida sea la respiración, más rápido se van consumiendo y más corta es la duración de su vida; la respiración lenta aquieta y calma las emociones. La sensación de relajación producida por esta recitación del Soham es una buena preparación para una provechosa sesión de meditación”.
Divino Discurso de Bhagavan Sri Sathya Sai Baba del 10 de Mayo de 1969.
“Cuando se sientan a meditar sobre el principio del Soham, observarán que el ‘so’ entra y el ‘ham’ sale mientras inhalan y exhalan. Este proceso debe ser observado cuidadosamente. Aquí ‘so’ se relaciona con el Principio Divino y ‘ham’ con el ego (ahamkara). De modo que mientras la Divinidad entra a nuestro cuerpo, el ego nos deja. Y ese Principio Divino que ha entrado a nuestro cuerpo debe ser mantenido firmemente en nuestro sistema por medio del proceso de la retención del aliento (kumbhakam). La gente que hace prácticas de respiración llama estos procesos inhalación (puraka), retención (kumbhaka), y exhalación (rechaka) del aliento. El Soham, o Hamsa Gayatri, consiste en inhalar el aliento por una nariz mientras se canta ‘so’ y exhalar el aliento por la otra nariz mientras se canta ‘ham’, y reteniendo el aliento por algún tiempo en medio. El método más efectivo es observar estos tiempos de manera estricta para los tres procesos del Soham. El descuidar estos tiempos al hacer ejercicios de respiración, pone en peligro la vida misma. El tiempo de duración de los tres procesos de puraka, rechaka y kumbhaka debe ser siempre el mismo. El tiempo es esencial en esta práctica de respiración, puesto que Dios es la Personificación misma del Tiempo (Kalasvarupa). Nuestras resoluciones (samkalpas), deben ser siempre de naturaleza sátvica. Para que tengamos resoluciones sátvicas, nuestro aliento debe ser de naturaleza pura”.
Divino Discurso de Bhagavan Sri Sathya Sai Baba del 12 de Octubre de 2002.
Con la práctica: de KO HAM a SO HAM
“Desde el momento de su nacimiento, el hombre se preocupa por su futuro. El primer grito del niño es “Kua, Kua”, “¿de dónde he venido?”. Si analizan lo que les sucede todos los días, comprenderán por qué un niño llora cuando nace. Al ver la interminable serie de problemas que lo aguardan, el niño grita: “¿Dónde estoy?”. Los hombres olvidan el lugar de donde vinieron, se pierden en deseos mundanos. Pocos hay que, como Prahlada, desde el momento de su nacimiento realizan su divinidad inherente y dicen: “Soham, Soham”.
Los mortales ordinarios se preguntan “¿Koham? ¿Koham?”, “¿Quién soy yo?”. No obtienen la respuesta hasta el fin de sus vidas. No se dan cuenta de que la respuesta es: “Yo soy Dios”.
Unos pocos buscadores serios empiezan con “Ko-ham, ko-ham” y terminan con el descubrimiento de “Yo soy Él” o “So-ham”.
Divino Discurso de Bhagavan Sri Sathya Sai Baba del 6 de Mayo de 1987.
“La adoración de las padukas (sandalias divinas), celebrar ritos y festivales son diferentes caminos que guían hacia el principio de la unidad. Todos estos rituales son necesarios hasta que comprendan que Dios es uno; por eso no deben pasar toda su vida en estos rituales. Cuando nacen lloran “¿koham? ¿Koham?”, que significa “¿Quién soy yo”? No deben morir con la misma pregunta en los labios. Antes de morir deben ser capaces de decir “Soham”, “Yo soy Dios”.
Divino Discurso de Bhagavan Sri Sathya Sai Baba del 11 de Octubre de 1998.
“Más adelante, después de larga práctica” (…): de SOHAM a OM.
“Repitan “Yo soy” o Soham con cada aliento: So cuando inhalan y Ham cuando exhalan. So significa él y Ham significa yo y cuando completan la inhalación y la exhalación, sientan que So o sea el Señor y Ham, o sea yo, son Uno. Más adelante, después de larga práctica, la idea de Él y yo como dos entidades separadas desaparecerá y no habrá más So ni Ham. Estos sonidos quedarán reducidos a O y M, es decir, serán el Om o Pranava. Repitan ese sonido a partir de entonces con cada aliento y esto los salvará de la esclavitud de la cadena de nacimientos y muertes, porque es la Adoración del Sonido Primordial (Pranavopasana) que recomiendan los Vedas”. Divino Discurso de Bhagavan Sri Sathya Sai Baba del 22 de Mayo de 1965.
“Las personas que han adquirido una posición más elevada creen que son jivis (individuos separados). Para ellas, el mantra puede ser Soham (yo soy Él), de tal forma que puedan eliminar el sentimiento de separación. En realidad, aun este mantra tiene un aspecto de distinción, ya que propone un “yo” y un “Él”. ¿Cómo puede conducir este mantra a la conciencia del Uno? La siguiente etapa más alta es la átmica. Cuando el hombre alcanza este nivel de conciencia, desaparece la idea de “yo” como diferente de “Él”. Es decir, So (Él) y Aham (yo) se desvanecen y Soham se eleva a Om. El mantra de las personas conscientes del Atma en ellas es Om, o Pranava”.
Divino Discurso de Bhagavan Sri Sathya Sai Baba del 14 de Junio de 1983
“La bienaventuranza es la naturaleza del Alma, la realidad más íntima de ustedes. Esa realidad les está recordando su existencia con cada aliento que toman: Soham, Soham, “Él yo”, “Él yo”. El ser está repitiendo que no es el limitado, el prisionero del cuerpo; es una ola del vasto océano llamado Él. La inhalación es Él y la exhalación yo. Inhalen lo vasto y exhalen lo limitado. Esto es lo que debe observarse durante el estado de vigilia. Cuando están en el sueño profundo, la conciencia del cuerpo desaparece; no hay conciencia del mundo externo, del cual, durante su vigilia, sentían formar parte. No hay So ni ham, ningún Él o yo: todo es uno, un todo integral. El aliento entonces no dice Soham sino Om. Fúndanse en ese Om. Tengan conciencia de él, siempre. Ése es el Vedanta, el fin de los Vedas.”
Divino Discurso de Bhagavan Sri Sathya Sai Baba del 6 de Noviembre de 1967
“En cada respiración ustedes repiten “Soham” “Yo soy Él”, y no sólo ustedes, sino todo ser vivo en la creación. Esto es un hecho que siempre han ignorado. Acéptenlo ahora. Cuando observen su respiración y mediten en esa gran verdad, Yo soy Él, lentamente ambos se fundirán, y para siempre desaparecerá la dualidad. Soham se habrá transformado en Om, el sonido primigenio; el Pranava que los Vedas proclaman como el símbolo del Absoluto Universal, subyacente en todo, sin forma. Ese Om es la propia forma, la realidad detrás de toda esta “irrealidad relativa”. Ésta es la práctica más genuina, el trecho final en el progreso del buscador”.
Divino Discurso de Bhagavan Sri Sathya Sai Baba del 21 de Noviembre de 1979
JULIO 2018
“Sigamos el karma de la liberación, el camino de la felicidad del Alma que es verdadero, eterno y sagrado.”
1. El poder de la meditación
“El hombre genera alguna forma de karma (efecto de acciones pasadas en ésta o previas vidas) desde el despertar hasta el momento del sueño; es decir, desde el nacimiento hasta la muerte. No puede permanecer quieto sin generar karma. ¡Quienquiera que sea, no podrá evitar esta situación por ningún medio! Pero cada uno debe entender claramente cuál es el tipo de karma en el que se involucra. Existen solamente dos tipos de karma: 1) Vishayakarmas, que son sensoriales o que encadenan, debido al deseo por los frutos, y 2) Sreyokarmas, que son karmas liberadores, que son puros, perfectos.
Los karmas que encadenan, o vishayakarmas, han aumentado en nuestros tiempos hasta quedar fuera de control y, como resultado de esto, la tristeza y la confusión han aumentado; a través de ellos no puede obtenerse paz interior, ni felicidad.
Los sreyokarmas, en cambio, brindan alegría y prosperidad progresivas con cada uno de nuestros actos; dan felicidad al Alma, y no están relacionados con la mera alegría externa. A pesar de que los actos que genera el sreyokarma sean exteriores, siempre existe una atracción hacia lo interior. Este es el camino correcto, el verdadero camino.
El karma que encadena incluye todas las actividades relacionadas con los objetos externos. Generalmente se incurre en él cuando existe un deseo por obtener resultados concretos. Esta ansiedad nos conduce a empantanarnos en el “yo” y “lo mío”, y nos entrega al demonio del deseo y la codicia. Si uno toma esta dirección, habrá llamaradas súbitas en su camino, ¡como cuando se arroja ghee (mantequilla clarificada elaborada con leche de vaca o búfalo) a la hoguera de los sacrificios! Darle prioridad a los objetos sensoriales sería lo mismo que darle importancia al veneno.
Pero, si aun cuando nos ocupemos de este tipo de actividades y objetos sensoriales, no ponemos interés en los resultados y las consecuencias, entonces no solamente podremos vencer el “yo” y lo “mío”, el deseo y la codicia, sino que podremos permanecer alejados de ellos y nunca nos preocuparán.
El sreyokarma, o karma liberador, es puro, perfecto, sin egoísmo e inmutable. Su característica principal es la acción sin premeditación de los resultados, tal cual se expresa en el Gita (verdadero texto de la Rectitud). La práctica de esta disciplina incluye el desarrollo de: Verdad, Rectitud, Paz y Amor. Si mientras seguimos este camino también nos dedicamos a la disciplina del Nombre de Dios, ¿dónde podremos encontrar mayor alegría y bienaventuranza? Este camino nos dará la más completa de las satisfacciones.
Si todos siguiésemos este sendero, el Señor proveería a cada uno de nosotros con todo lo necesario, todo lo que merecemos y todo lo que confiere paz interior. Ofrezcámosle todo al Señor sin esperar ningún resultado; así, verdaderamente, se encuentra la alegría plena y es, sin lugar a dudas, el camino más fácil.
Mientras que es muy difícil mentir y actuar en contra del dharma (la acción correcta), es muy fácil expresar la verdad y transitar el camino del dharma. Decir las cosas exactamente como son es una tarea sumamente placentera; no necesitamos perder ni siquiera un instante pensando en ello, porque para poder hablar de lo que no es, ¡uno debe crear lo no existente! Esto nos arroja al miedo y a la fantasía, a una atmósfera de preocupación y ansiedad.
De manera que, en vez de entregarnos al karma que es sensorial y nos encadena con todos sus problemas y complicaciones, sigamos el karma de la liberación, el camino de la felicidad del Alma que es verdadero, eterno y sagrado.
El mejor medio para llegar a él es por medio de la meditación.”
JUNIO 2018
“Lo que se denominará “meditación”,
se dará cuando tengan como objetivo lo Divino”
1 Lluvias de verano Tomo 2 cap. 24
“Cuando nos referimos a la meditación, hay tres cosas implícitas: en primer lugar, está la persona que medita: el Dhyata; en segundo, el objeto de la meditación: el Dhyeya, y en tercero, está el proceso mismo de la meditación: el Dhyana. En la verdadera meditación, estos tres deberían fusionarse. La persona que medita debería identificarse por completo con el objeto de la meditación y debería perder la conciencia incluso del hecho de estar meditando. Cuando medita, su atención debería fijarse hasta tal punto en el objeto de la meditación, como para que llegue a perder su propia identidad y a olvidar también su compromiso en la acción de la meditación.”
Lluvias de verano Tomo 6 cap. 15
MAYO 2018
“…de la inquietud a la serenidad y de la serenidad al Resplandor Divino.”
“La meditación es un proceso que se produce en un plano muy superior al de la percepción sensorial humana. Tratándose de un proceso mental que involucra ver a través de los sentidos, se podría considerar a la concentración como situada por debajo o dentro del ámbito de los sentidos, en tanto que la meditación se sitúa más allá o por encima del mundo de los sentidos. Si la meditación fuera tan fácil como la concentración, los grandes rishis (santos) del pasado no habrían necesitado practicar austeridades rigurosas ni someterse a innumerables dificultades en lo profundo de las selvas.
Para quien desee practicar la meditación, resulta aconsejable que tome una luz como objeto de su meditación y no una forma de la Divinidad, como la de Rama, Krishna o Isvara, porque también estas formas están sujetas a cambios y perecen en última instancia. La luz no perece ni cambia. Además, una llama puede encender millones de otras sin extinguirse y es, por ende, inagotable.
En este proceso de la meditación en la luz, la progresión debe ir de la inquietud a la serenidad y de la serenidad al Resplandor Divino. ” Lluvias de verano Tomo 6 cap. 15